Las células T inmunes pueden ofrecer protección duradera contra COVID-19

Por el Dr. Francis Collins, NIH

Gran parte del estudio sobre la respuesta inmune al SARS-CoV-2, el nuevo coronavirus que causa COVID-19, se ha centrado en la producción de anticuerpos. Pero, de hecho, las células inmunes conocidas como células T de memoria también juegan un papel importante en la capacidad de nuestro sistema inmunológico para protegernos contra muchas infecciones virales, incluido, ahora parece, COVID-19.

Un nuevo estudio intrigante de estas células T de memoria sugiere que podrían proteger a algunas personas recientemente infectadas con SARS-CoV-2 al recordar encuentros pasados ​​con otros coronavirus humanos. Esto podría explicar por qué algunas personas parecen defenderse del virus y pueden ser menos susceptibles a enfermarse gravemente con COVID-19.

Los hallazgos, publicados en la revista. Naturaleza, provienen del laboratorio de Antonio Bertoletti en la Escuela de Medicina Duke-NUS en Singapur [1]. Bertoletti es un experto en infecciones virales, particularmente hepatitis B. Pero, como tantos investigadores en todo el mundo, su equipo ha cambiado su enfoque recientemente para ayudar a combatir la pandemia de COVID-19.

El equipo de Bertoletti reconoció que muchos factores podrían ayudar a explicar cómo un solo virus puede causar síntomas respiratorios, circulatorios y otros que varían ampliamente en su naturaleza y gravedad, como hemos presenciado en esta pandemia. Uno de esos factores potenciales es la inmunidad previa a otros virus estrechamente relacionados.

El SARS-CoV-2 pertenece a una gran familia de coronavirus, seis de los cuales anteriormente se sabía que infectaban a los humanos. Cuatro de ellos son responsables del resfriado común. Los otros dos son más peligrosos: SARS-CoV-1, el virus responsable del brote del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS), que terminó en 2004; y MERS-CoV, el virus que causa el Síndrome Respiratorio del Medio Oriente (MERS), identificado por primera vez en Arabia Saudita en 2012.

Los seis coronavirus conocidos previamente provocan la producción de anticuerpos y células T de memoria. Además, los estudios de inmunidad al SARS-CoV-1 han demostrado que las células T se quedan por muchos años más que los anticuerpos adquiridos. Entonces, el equipo de Bertoletti se propuso comprender mejor la inmunidad de las células T contra el nuevo coronavirus. Lee mas …